lunes, 8 de febrero de 2010

siguiente quincena y hasta el 8 de febrero...

Buenos días queridos amigos/migas (no de pan, no confundan)...

Les voy a contar una historia de un tal Spencer...

Spencer estos días fué una de esas personas que están todo el día haciendo algo, que seguramente piensa que es importante, que lo ocupa todo el tiempo, y que no le dejó escribir este relato que nos constata al acueducto correspondiente en este año lectivo...

Las pinturitas que hizo los primeros días las vieron, ahora se metió con otra mucho más desafiante, en cuanto a la técnica: un hiper-realismo o realismo fotográfico, como quien dice.

El motivo? buscar "Enganches" o "atalaje" en wikipedia (como los hago trabajar... que horror!!!!, peripatético)

Todo surgió de la idea de ir a sacar fotos a un atalaje en Miramar. Las fotos en cuestión... de días, fueron sacadas a las corridas, es decir, corriendo de un lado a otro de los obstáculos pertinentes... salieron buenas igual.

De la selección posterior es que tomé una imagen y decidí hacerla obra de arte. Con el interés despertado luego de dormir el tiempo correspondiente al descanso propio o ajeno a tiempo de vacaciones.
La idea en sí es plasmar un momento, un instante de esos que no vuelven a repetirse, como todos los instantes generalmente... esa fracción de segundo en que uno puede encontrarse observando algo y de repente cierra los ojos y la imagen queda almacenada en el recuerdo, en la neurona número 234634562 (tal vez la de al lado... no sé, es discutible).



Aquí una foto de la paleta correspondiente a la obra en proceso...


Estos días circulé por un par de casas.
Fuí invitado a casa de una familia muuuy buena, que me ofreció quedarme en su altillo a los cinco minutos de haberme conocido, quizás menos...

Allí estuve casi dos semanas, hasta que pudo más el afán nomadístico o nomástico propio de los seres de mi especie de no se qué...

Terminé en casa de un amigo con quien había compartido habitación en un viaje anterior por estos pagos londinoidicos alternantesdeayer.

En sucesivos momentos fuímos a visitar gente con la Macanuda regioalpela... muuuy bueno.
La última esssspedición la hicimos este sábado a Windsor, o "viento de monja". El lugar es increíble, hasta tiene pasto... Colinas; árboles centenarios como la Avenida; caballos; camiones; casas; gente; castillo de la reina; más gente; desfile de soldados al mediodía; sesétera. (cuando Baje las fotos las cuelgo este día en vez de este paréntesis... qué tul... qué buena idea... igual ahora cambié de opinión, el paréntesis lo voy a dejar, para que se note que cada taaaaaaaaanto tengo alguna buena idea... jeje)

También pude viajar en camión portacaballosdepolo, una experiencia... como diría... alta, sí, esa es la palabrota adecuada.

Me regalaron una bicicleta anacleta!!!!!!!!!!!!!!!!!
Eso fué otro día que fuímos a comer a la casa de un matrimoño joven que en breve se está volviendo a Argentina (ese es uno de los motivos por los cuales me dieron la Ana Cleta; el otro es un gran corazón)

Como siempre no doy nombres en cuestión de los susodichos, para no alterar el orden público propio del copyright subjetivo de cada uno de los nombrados, así que sólo diré que fuímos a lo de Cris y Luli, a lo de Horacio y Elena, Paul y Sra, Tomy y Luli... y ya es bastante, no sigo para no cansar a los que no los conocen. Igual, sino se pueden dar cuenta por el apellido, son todos de la familia de los Sereshumanos.

Otro día fuímos con Macanuda a visitar un castillo de Nosequienmongo. El castillo ideal para que visiten las mujeres: estaba lleno de vetidos de la época, las modas, las puntillas (no dije andar en puntillas...oho)... etc.


Acá se puede ver una de las salas, como verán al rey le gustaba el arte


Después recorrimos también los jardines, laguito artificial, fuentes, etc.
Esto lo hicimos entrando con un tarjeta que generosamente nos ofrecieron Horacio y Elena. Fuímos a su casa un par de veces y siempre matándonos de risa con un cuento más divertido que el otro. Capaz me contagio y empiezo a hacer chistes de los buenos... quien sabe?...


A su vez, el tiempo siempre nos acompaña, es como si fuera coincidencia... a donde vamos nos acompaña el tiempo; uno frena, y el tiempo sigue corriendo. Es como si la sombra de uno se moviera aunque las luces se quedaran quietas en el mismo lugar.

Bueno, gentelinda, como ven ya empezó la monotonía de los días en que se hace lo mismo (en este caso pintar) y por eso no hay mucho más que contar.

Los quiero igual

Feliz día del tincazo en la cucuza del cara de avestruz aquel, que se hace el opa

2 comentarios:

  1. Que disfruten de Ana Cleta !

    Envianos pronto a tu último desafío, qué misterio...

    No permitas que tus presencias experimenten celos, una obra se nutre de su anterior para enriquecerse y no para devorarla. Cuando observas algunas de tus primeras obras muy posiblemente veas el germen condensado de las subsiguientes.

    El más grande de los sabios un día me regaló unas palabras : "En lo pequeño yace el germen de lo grande"

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  2. Qué lindo el castillo de las puntillas!!!! Y que bueno debe haber sido el Viento de Monja!!!! Ahora que tenés a Ana Cleta...más divertido todavía!
    Se lo extraña y quiere mucho!

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